En las jornadas de FEAFES-Andalucía , tituladas "De la esquizofrenia a la esperanza" que se celebraron en el Hotel Mijas, tuvimos el privilegio de contar con la presencia del Dr. Vicenç Navarro quien pronunció la conferencia inaugural sobre "El estado de bienestar". La conferencia fue una excelente charla basada en su libro: "Bienestar insuficiente, democracia incompleta. Sobre lo que no se habla en nuestro país". ¿De qué hablan nuestros políticos? En estos momentos (Octubre 2005), se está dando un supuesto debate sobre el Estatut catalán que más bien parece el efecto de una paranoia generalizada. Al tiempo que se están debatiendo (?), en el Parlamento, los Presupuestos Generales del Estado, lo que en un país normal tendría que ser el principal tema de discusión en los medios, si no en la calle. Ha pasado desapercibido el hecho de que las cuantías aprobadas para el llamado "Cuarto pilar del Estado de Bienestar" sean solo de unos pocos cientos de millones de euros (después de duplicadas por enmiendas de IU y ERC), cuando en 2 legislaturas se preveía llegar a 8.500 millones lo que aún sería una cifra muy insuficiente (ver mi blog de 12 Mayo 2005). Sin embargo, se multiplican las referencias de tono catastrofista en torno al Estatut y al concepto de "nación" aplicado a Cataluña. La derecha clama contra lo que se le antoja que llevaría al "desmembramiento" de España y un alcalde socialista dice que le produce urticaria la lectura del primer artículo por la referencia a la nación catalana. Claro que así no tendrá que leer el resto del texto, como probablemente ha ocurrido con casi todos los críticos dadas las insensateces que se oyen por doquier. No es extraño que algún exaltado escriba cartas a la Dirección de un periódico diciendo que si la sociedad no reacciona "iremos al caos, a la desmembración y al horror" y que todo el cuerpo social debe arrimar el hombro "para salvar a la patria común, nuestra querida España, la nación más antigua de occidente. Y con ella a la sociedad española".
¿No nos suena algo este lenguaje a los que hemos vivido en el franquismo?
Y mientras esta paranoia se extiende, no nos preocupamos del atraso social, educativo y tecnológico que nos coloca a la cola de Europa junto con Grecia y Portugal: de lo que no se habla en España.
¿No nos suena algo este lenguaje a los que hemos vivido en el franquismo?
Y mientras esta paranoia se extiende, no nos preocupamos del atraso social, educativo y tecnológico que nos coloca a la cola de Europa junto con Grecia y Portugal: de lo que no se habla en España.